domingo, abril 29

Bebes riendo

y mae!
jajaja

jueves, abril 26

Bebé riendo

sapo





una
angustia
sorda


oda a la pao

" ODA A LA PAO"
por EL PAVA.


OH! día misero. Que Pao se fue chillada,
dejo caites dejo trazo de suela desfigurada.

Rayadme, oh! chapulin.
Que la vida no me es mas.

OH! dia pobre. Que Pao solloza.
olvido cuaderno y lápiz.

Dejad entrar el mensajero. Para mentarle la madre.

OH! día esplendido. Que Pao regresa.
Llega con nutela y pino grillio.

Venid oh hermanos y abrid la puerta, que pan, hay patodos

OH! Magnifico dia. Que la Pao...

miércoles, abril 25

belén


ay, las palabras

J:
"Aún hoy nos sorprende y nos preguntamos por qué los europeos pudieron caer en la cuenta de tomar la Nada en un sentido nihilista. Para nosotros, el vacío es el nombre eminente para lo que usted quisiera decir con la palabra ser"
"De un diálogo del habla"
Entre un Japonés y un Inquiridor (Heidegger)

martes, abril 24

SUMMER 68 PINK FLOYD

qué bueno, versión

Shimme sha wabble Hot Antic Jazz Band 1985

la historia de joaquín, la nuestra humana


cuando ana me relató que a joaquín lo habían trasladado fuera del ala oscura, decidí que era hora de ir a visitarlo.

planié muy cuidadosamente la visita. así, preparé comida en mi cocina de leña, unas cebollas moradas cocinadas en vino tino con azúcar, junto a un trozo de carne grueso y apetitoso incluso para el carnívoro más pusilánime, sazonado en aceite de oliva con ajo y romero. recordaba que a quincho siempre le gustaba sentir la sangre de un animal muerto en sus dientes, lengua y garganta, pues decía que refrescaba su sed de dolor y maldad. por estar pensando en sus dientes sucios de sangre de res, se me quemaron las pobres cebollas moradas y la carne se sobrecocinó; ya no servía mi intención de refrescar su vida por medio de un almuerzo trabajado, tenía entonces que elaborar otra estrategia para mi visita inaudita.

de tal manera recordé que había un vino tinto que a quin le fascinaba, se llama Tierra del Sur, argentino, cerca de la zona chilena donde se hacen los mejores vinos de este suelo. me recordé, porque viendo una foto de la vasta y amplia playa de la costa puntarense, fui trasladada yo a la oscuridad de aquella noche en la que aquél se emborrachó con dicho afrodisiaco y se lanzó al mar mientras gritaba alaridos coyotescos y llanto sufrido al mar, mojando sus venas desangradas color vino Tierra del Sur, diluídas con la sal y el oleaje blanco de la mar. sin embargo, cuando me levanté y caminé lentamente hacia la despensa, llegando al destino, descubrí que efectivamente había dejado de comprar este licor debido a, precisa e irónicamente, el episodio mismo que acabo de refrescar en mi cuerpo. además, ¿cuál sería la casualidad de que podría tomarme una copa o dos en una sala del ala no oscura con él? realmente, yo no estaba pensando clara ni inteligentemente. necesitaba creativar mi mente...

me acosté sobre mi cama, viendo el techo blanco de relieve uniforme, el cual reflejaba la luz mediodial. cerré los ojos y traté de recordar a joaquín, su olor, su sabor, su locura. lo único que queda fresco en mis sentidos es su demencia, aquella que inevitablemente me enamoró de su sencillez de perturbación humana. ¡cuántas tardes gozábamos con su invención histórica de un pasado afectado de la tortura de ser él quien era! ¡cuántas veces nos besamos entre golpes, cachetadas y violaciones violentas de color violeta! cuando me acuesto a dormir me cuesta abrazar su ausencia perfumada de esquizofrenia y paranoia acechada en las calles de berlín del este. igual que el grafitti de estas avenidas, su trastorno no era producto de un malestar real, sino de uno vivencial, una creación a partir de su insatisfacción de tener que vivir en un mundo en el cual la inhumanidad, dessolidaridad e indiferencia reinan a manera de león en la selva. su equilibrio intelectual se transformó así en un desequilibrio emocional de la existencia misma llevado al extremo, intentando llamar la atención de los no-locos con lo opuesto, buscando abrir sus ojos por medio de las salidas caóticas de su sentir.

por todo esto y más, joaquín estaba ahora apenas salido del ala oscura, donde la sociedad mete a aquellos que han des-aprendido a vivir entre los demás, a éstos que deprimidos dentro de su piel cantan ahuyentando la comodidad y tranquilidad serena de un día más. ellos, los locos... sí, claro, por supuesto, había dicho joaquín, entretanto lo amarraban a un bus de garrotes y rejas eléctricas; como no, así es, mientras lo escondían tras paredes negadas de verde y aire fresco; ¿por qué no?, la verdad, las cosas... pues, ¡obviamente! y así, joaquín moría sus días en un ala sin luz.

bueno, divagué de mi propósito y las horas de visita estaban por terminar. fue por esto que decidí aguardar unas horas en mi aposento hasta que sonara la campana del almuerzo y de las pastillas, pues no tenía qué ofrecerle al sabio demente. cínicamente me había desposado de mis trajes de negocio, de mi figura esbelta de mujer independiente en un mundo de hombres y de mi deseo de amar a manera de hollywood. así, yacía sobre mi cama blanca, acostada entre cuatro paredes además blancas, sin espejos, sin nada filoso con lo que podría abrir el cerrojo de mi realidad petrificada; aquí, guardada como una niña castigada severamente por ignorantes padres abusivos. y ahora, viendo a través de mi ventana amarrada y la imposibilidad de salir corriendo a la naturaleza, me doy cuenta que tampoco hoy podré ver a mi querido joaquín.

viernes, abril 20

famiglia (ravasio) piras



antipasti

casa zia agostina

some cat was laying down.

templo de antas (sardegna, italia)


Increíble...

cuadro urbano

los buenos árboles de la ucr, un pequeño gran escape del caos urbano...

jueves, abril 19

calle de la amargura, san pedro

cerca de la UCR y Terra U, estaba la Mazorca...

al fondo siempre el Candil y el Pomodoro,


y al paralelo, el caos burbuja en las calles de san pedro...




un día más en las afueras de la UCR.

miércoles, abril 18

Lic. Phiblógsopho


el grande en acción, aunque pequeño y moreno... ja!











martes, abril 17


el existir tiene una manera perversa de hacerte sentir...


metáforas



vengo de fumar, y las voces querían salir corriendo sobre el viento del aliento, y de hecho algunas lograron alcanzar la abertura de los labios, pero no sé... siempre nos traicionamos diciendo lo que pensamos. y sin embargo, sin conversación, sin intento de comunicación, nos estancamos en un color blanco: sin nada pensado, sin nada imaginado. en otras palabras, sin un ideal construido.


tal confusión es entonces una levedad del ser, aquel blanco, donde el secreto del cuerpo es su pesadez en el hoyo central del ser. buscamos las plumas sobre nuestras alas pero en realidad nuestra piel es una piedra, convertida en roca, convertida en ocasión.


la opción es absurda. ¿saben qué también es absurdo? el perdón... es una habilidad para tomar todo lo que uno quiera de manera habitual. ¿qué sucede con aquellos arrepentimientos que son profundos al ser, no limitados a un perdón superficial? ¿son también pesados? su livianez es plana. un perdón es el significado del fin premeditado. éste viene de la culpa, es el efecto de la causa anterior: el dolor, el mal, el machete, el chuchillo que ha rechinado en la cumbre de un ojo viejo.


sola me gustaría dormir; sí, despertar sin nadie que me mire, sin nadie a quien le deba un abrazo por los mejores días de la vida. pero, ¿para qué?


hay una montaña cerrada. un rostro con su incoherencia. un puro de amor. el amor, esa palabra... algo así comentó cortázar. para kundera, el amor nace de una metáfora...

¿cuál es, pues, nuestra metáfora?


de aquí nacemos nosotros, entre estas dos canciones ardientes.

mentar


miente el que mienta palabras repetidas de pasado continuo. al hablar seimpre vocales absueltas de consonantes, el sonido muestra una cara monótona. ¿cómo rellenar los espacios vacíos?

cuando uno bebe sacos de arena, la sed saciada busca quebradillas montañosas de tierra fangosa. con su polvo ventoso quiebra sobre la lengua partículas resecas que ahuyentan el calor del sudor. no se niega que nunca nadie jamás haya podido no decir que nada nunca fue para siempre negado...

cansa el canto del topo en el desierto, su dios abandona al ser abandonado. la soledad demuestra desfases de cara comprimida en ojos, boca, nariz y agua brillosa. al verse en el reflejo del amado quien ama con muerte de amante, se rompe el cristal en fragmentos desorientados de cariño.

arrastrando su cámara de barrigas pesadas, las huellas en el mar se ahogan en su profundidad absolutamente llana. las marcas de un pasado no sostienen ya el punto coincidente entre la representación de la cosa representada. el verosímil posible busca su apariencia desengañada en lo que literalmente se habla sobre lo que se es. una aparente verdad desmembrada reluce sacos de agua putrefacta al lado de la alcantarilla mundial.

por juegos así y muchos más caminos entrecruzados, todo posible y nada mentado.

bowie y el bambù





you're a juvenile success...

lunes, abril 16

paula y aivan


paula miraba hacia fuera de su ventana aérea y podía notar que bajo las alas del gran avión transtlántico existían pedazos de tierra rodeados por un mar transparente y color acqua. junto a ella estaba sentado el amor de su vida, aivan, durmiendo con su cabeza apoyada sobre el hombro de ella. mientras ella le acariciaba su cabello semilargo, sostenía su cabeza con todo su amor y su entrega total de persona. cerró los ojos y comenzó a soñar junto a él, pues su unión existía más allá de una simple comodidad relacional.


cuando llegó a la puerta, la notó cerrada. detrás de ella podía escuchar los gemidos de quienes no duermen y la cama que crujía con el mínimo movimiento de acomodación. el cerrojo se hallaba trancado, y la luz que provenía de afuera no vislumbraba nada de lo que podía suceder adentro. así, comenzó a luchar contra la puerta, a gritar, a patearla con sus puños cerrados y a exclamar entre sollozos la justicia por su amor. luego, al ver paula que adentro se rehúsaban a dejarla entrar, tomó un cuchillo y decidió dejar escapar su furia por medio de cortes profundos, rasgando su tejido de piel hasta notar que la sangre se coagulaba sobre su extremidad.


con tiempo, cayó en un sueño confuso y se acostó a dormir cobijada por su sangre autoproclamada. llegó entonces una sombra y besó sus brazos, sus lágrimas y sus ojos cerrados. la abrazó con todo el amor de quien no sabía qué había hecho, tan solo la amaba. cuando abrió los ojos, lo vio sonriendo con sus ojos de payaso triste pero ella le hizo un gesto con sus labios berrinchoso, dejándole saber que el dolor no era superable, que prefería morir antes que entregarse a este adiós siempre tácito. sin embargo, aivan la sostuvo sobre los vidrios cortados y caminó sobre ellos cuando el río los ahogaba; tapaba el sol con su cabeza cuando paula se enceguecía con su calor, y guíaba su camino oscuro a manera de estrella del norte. y aivan, el hombre de su amor, siempre clavó su propia cruz sobre su espalda para poder caminar junto a ella cuando ésta cayese sobre sus pasos. ella, a cambio, amó a aivan con todo su ser, y entonces, despertó.


volvió a ver al ser humano que dormía junto a ella en el transporte aéreo; escuchaba su música húngara por tercera vez seguida y olía a ese olor tan familiar, tan cercano a casa, tan de ellos, que no pudo más que olvidar el sueño que le indujo aivan a ella, a paula. cuando aterrizó el avión, la tierra dejaba de moverse al son de un eco comprimido y los sueños dejaron de atormentarlos. por un lado, esperaban y recogían las maletas, por otro, se miraban con sentimiento pleno y ojos profundos, pero por un siempre tercero, sufrían en silencio, como la sombra que se acercó a desvelar el sufrimiento de paula aquella noche en su cama.

Queen and David Bowie - Under Pressure

Can't we give ourselves one more chance?
Why can't we give love that one more chance?
Why can't we give love give love give love?
Give love give love give love give love give love

Cause love's such an old fashioned word
And love dares you to care
For the people on the edge of the night
And love dares you to change our way
Of caring about ourselves

This is our last dance
This is ourselves under pressure
Under pressure

domingo, abril 15

David Bowie - Oh You Pretty Things

qué buena versión. me encanta esta pieza.

el orgasmo del ser


por primera vez en mi corta vida, he podido experimentar lo que es un momento inexpresable. me he vista envuelta en el puro sentir de la situación, como si tan solo me sucediera, sin nunca ser capaz de enumerarla, catergorizarla o comentarla. lo más cercano que puedo llegar a ella es por medio de rodeos, por el centro de la experimentación misma es imposible acceder a ella. y digo "ella" simplemente porque necesito darle un nombre y dado que nunca se dice de la femenidad de las cosas por regla general del español, hoy escojo las palabras para manifestar(me) que ayer acaecía el ser sin mayor distinción nominal.




y entonces, jugaba, bebía y me drogaba con el humo verde, y siempre estaba presente esta una algo sin nombrar, una algo que entre tiempo y sonrisas, además de música y bebidas, existió y seguro seguirá existiendo: ella, la que no puede ser dicha, sin mayor nombre que un pronombre.



las situaciones de la vida, los contextos dentro de los cuales nos movemos a manera de lento caracol que deja atrás una baba densa y poco fluída, son irradicales. ¿cuántas veces hemos sufrido un segundo en el cual tenemos la audacia sincera de declamar: siento? creo que hace falta un esplendor de luz apagada para poder caer en estos huecos previos al clímax (como haber amado), donde se es capaz de acceder al orgasmo del existir: ser. sin embargo, esta algo siempre nos pasa como el aire entre los dedos, impercibible.



con el obstáculo del lenguaje intento decirla, darle forma, pero como el explotar mismo de un instante penetrado, no hay más oralidad que el sentimiento mismo. así, accediendo a los juegos amistosos, sentía, y no podía ni pensarla, pues nada más era en todo mi cuerpo. con todo, este intento de dilucidación simplemente me aleja de ella, pues pensarla en palabras me confabula el sentir mismo y así, voy olvidando...


creo que podría decir más, pero no quiero que se me esfume su presencia placentera de vida misma.


de tal manera, en la oscuridad misma, ante lo que no se manifiesta con luz lenguajera, está ella.

martes, abril 10

lunes, abril 9


como una ventana, no sé si miro hacia fuera o hacia dentro.


me duele la vida y sus sonrisas.

domingo, abril 8

sábado, abril 7

Veinte Años

me gusta mil veces más la versión de Buena Vista Social Club, pero no la encontré.
si alguien la encuentra, ¡que me avise!

la pieza es pichudísima.

viernes, abril 6

clarice lispector

"De las bocas se deslizaba una saliva gruesa, amarga y untuosa, y ellos se orinaban sin sentirlo. Las mujeres que habían parido recientemente apretaban con violencia los propios senos y de las puntas una gruesa leche oscura manaba. Una mujer escupió con fuerza en la cara de un hombre y la saliva áspera se deslizó de la cara hasta la boca: ávidamente, se lamió los labios."








"Donde estuviste de noche"
Silencio

lunes, abril 2











EXPLÍCAME




domingo, abril 1

cuento encantado

cuando monto el caballo de la agonía, cabalgo por horas enteras, completas en su transcurrir minucioso. en tanto cuatro veces escucho lo asieno, muerdo mis labios cortados por el frío, despotricando contra el reflejo marcado en papel fotográfico. junto a gatos negros camino bajo escaleras verticales y en el horizontalismo donde el mar y el cielo se unen, caen las estrellas florecidas en la noche madrugueña. en mis manos las atrapo y las hago volar por entre mis silbidos, sectas mistéricas de algún tiempo lejano, los cuales se repiten en el círculo de la perfección ovalada.

cansada de lamentar el amor, se levanta la mujer de ropajes blancos de negrura, cargando la lámpara que con gas ilumina la escalera del caracol. protestando, junta la lluvia del bosque con sus manos, entretanto aprovecha para alimentarse con la ilusión de sus hadas, espejismo sereno de ratas moribundas. en su viaje crea colores protestantes, dejando en su ingle el recuerdo de la máquina inservible, pues imposiblemente la satisface. en compañía de la superstición por sus roedores cadavéricos, manifiesta un abrigo de piel raquítica, cubierta por huesos y gotas de rojo. de manera oscura, saborea el fuego donde ha cocinado sus amigas aladas de bigotes sucios y cubre con el manto de su sed la garganta raspada por la flema de su catarro.

al toparme con el horizonte unificado, noto el vuelo de la dama de oscuridad iluminada, a su lado arrastra los restos de su campamento asesinado, hocicos amarrados a un cordón dorsal por un sueño maldito del querer amar. el concierto de la madrugada comienza al son de su grito vacuo y hunde en su vacío el colorido de su piel abrigada. el sol comienza a soltar rayos olorosos, luz quemada y azules de la quinta hora, así capta ella mi presencia, absorta en la poética de mi pensar.

sentada observo su sombra reflejada en el aire y ella nota mi visión dulce, plena de lágrimas aún no derramadas y de sangre aún no menstruada. mi infancia es el pasado de ella la mujer abandonada, olvidada a vivir muerta en el bosque encantado; encarna sus púpilas en mi cabello rizado mientras siente el cráneo calvo de su estancia; piensa sus senos al castrar mi pubertad; desmiembra su boca al besar mis labios y lanza sus deseos irascibles hacia mi propio desear.

aquí mi caballo agonizante se aterroriza por el aura de la mujer encantada, las ratas aladas prueban su cola larga de tiempo y éste azota refunfuñando las patas de su sostén. así, corre lejos de mí, olvidándome en el lago donde la noche y la mañana se convierten cíclicamente alrededor de la existencia. sola, me he convertido presa de la soledad, aquella la mujer con la lámpara apagada, inconsciente de su propia profundidad oceánica manchada de luz.

mi agonía se ha marchado, pero ahora me invaden los roedores de la mujer solitaria, pues busca transgredir mi inocencia para convertirse finalmente en mí. abro mis piernas y ella denota mis curvas floreadas, la primaveral razón de ser niña, y toca mi interior para poder adentrarse calladamente. con su lengua conoce cada rincón y pliegue de mis coyunturas, saboreando su propio sudor mientras se ahoga en el flujo hormonal de su postración frente a mi cuerpo.

finalmente, soy fundida en una cuando dos veces canta la quinta mañana del tercer mes encantado. soy el principio del final, aquel que nunca termina de cantar, ahuyentando el pasar de cualquier andar perdido. me convierto ahora en esa la voz apagada y esparcida como compañera del amanecer caído. con silencio, me acuesto a dormir suciamente para nunca más recordar quién fue la mujer de ropajes centenarios.